Gabriel Sopeña quiere cantar mejor que nunca en su tarde-noche mágica en Las Armas
ANTÓN CASTRO Heraldo de Aragón 30/5/2024 A LAS 09:39
El poeta, cantante y compositor presenta el jueves 30 de mayo, a las 20.30, su disco 'Desiertos', y una amplia selección de sus diversos éxitos
Gabriel Sopeña sacaba el pasado viernes su tercer disco en solitario: 'Desiertos'. No ha tenido prisa este creador inagotable, laborioso, que se ha desenvuelto en multitud de tareas y proyectos, en grupos como Ferrobós o El Frente, en su colaboracion constante con su 'hermano del alma y de la música' Mauricio Aznar y con otro referente, Pedro Aznar, clave en su formación. Además, ha escrito para muchos intérpretes, ha musicado a muchos artistas, ha realizado discos con María Creuza, con Olga y Los Ministriles, y por supuesto con Loquillo. Y un sinfín de proyectos corales. Su carrera se resume en un libro como 'Cantar cuarenta' (Pregunta, 2023), donde se ve que escribió algunos himnos que ya forman parte de la banda sonora de los últimos treinta años al menos.
Esta tarde-noche, Gabriel Sopeña, con una poderosa y bien trabajada banda, toca en Las Armas. Presenta su nuevo disco, 'Desiertos', y tocará muchos temas, algunos popularizados por Mauricio Aznar o Enrique Bunbury entre otros. Hace unos días, Gabriel comentaba en Heraldo.es que sus canciones preferidas son 'Cass', que nace del poema homónimo José Luis Rodríguez García, y 'Hay una cruz en el Saso', a la que dieron especial vida los integrantes de Más Birras.
En el nuevo disco, está Gabriel Sopeña en plenitud. El enamorado del rock y del pop, el hombre que se formó con Bob Dylan, Tom Waits, Bruce Springsteen o Jackson Browne, entre muchísimos otros. Está el poeta, ilustrado y sensible, que canta al amor y al viaje (ahí están 'Dame fe' y 'Tú eres mi camino de Santiago', o 'Si alguna vez me faltas' o 'San Juan Mudéjar', que es casi como un relato de pasión donde se sugiere hasta el dolor), el soñador y rapsoda que emprende una travesía casi iniciática por Aragón en 'Morir de piel' (toda una declaración de afecto incondicional a sus raíces), la canta en aragonés y en castellano, en el corte doce, y ahí figuran esas piezas que definen su lírica, su gusto por las imágenes, y que quizá tarde o temprano sean pequeños himnos también: sucede con 'Nublo', ese primer tema que estuvo a punto de dar título al álbum, o con 'Coartadas', que tiene algo de inventario para vivir, soñar, amar y vencer las tribulaciones del destino.
Una canción especial es, sin duda, 'La canción del Matrero', uno de los temas que había trabajado con Mauricio Aznar -habían barajado unas 25 piezas para un disco doble y una apuesta nueva del vocalista fascinado por Argentina y Santiago del Estero, que soñaba dar un nuevo giro-, que constituye un recuerdo al amigo cómplice e inolvidable, objeto de una admirable película, 'La estrella azul', de Javier Macipe. Y conforma también otra apuesta de Gabriel donde hay un poco todo: ecos del cantautor que también es, ritmos clásicos del rock, juegos de voces (se incorpora la personalísima y madura entonación de Eva Lago), atmósferas incluso celtas y, por supuesto, sus sonidos habituales, que alternan la limpidez y la aspereza, y ese tono suyo, tan peculiar, que es cristal, emotividad, susurro y grito.
Gabriel Sopeña sigue ahí como un farero de sílabas del alma y de ritmos que exploran, poco a poco, el sentimiento, los afectos y las heridas de la vida. Y esta tarde, en Las Armas, a partir de las 20.30, contará con un grupo que le insufla aún más energía. He aquí sus nombres: Óscar Carreras al piano, los teclados y las voces; Jorge Gascón, guitarra y voces; Eva Lago, como segunda voz; Guillermo Mata, productor de 'Desiertos', al bajo y en la dirección musical; José Luis Seguer 'Fletes' a la batería y percusión, y Julio Calvo Alonso con su inseparable la guitarra eléctrica. Kike Cruz y David Gálvez se ocuparán de la parte técnica de sonido e iluminación
Fotografía: Toni Galán. Gabriel Sopeña con su banda, que exhibió su gran afinación y poderío en el Teatro Principal.